Aumento en las infecciones de transmisión sexual

Las infecciones de transmisión sexual (ITS) siguen aumentando en casi todas partes. El ascenso tras el primer año de la pandemia de COVID-19 está lejos de detenerse. La mayor frecuencia de encuentros sexuales casuales, las citas online a través de páginas web, el consumo de drogas (chemsex) y la percepción de una falsa protección si se toma profilaxis pre-exposición (PrEP) frente al VIH, han creado una tormenta perfecta para el brote sin precedentes de ITS (Pedrosa et al. AIDS Rev 2024; 26: 121-9;   Soriano et al. AIDS Rev 2023; 26: 127-35).

Hace más de una década, el miedo a contraer la infección por VIH llevó a reducir las relaciones sexuales con diferentes parejas y a utilizar condones. Sin embargo, tras el éxito de la PrEP con tenofovir oral para prevenir el contagio del VIH, se ha producido un «efecto compensatorio«, con un aumento de ITS como las infecciones por Neisseria gonorrhoeae (gonorrea)Treponema pallidum (sífilis), Trichomona vaginalis y Chlamydia trachomatis (Nguyen et al. AIDS 2018; 32: 523-30).

El consumo de drogas y alcohol contribuye a la potenciación de las conductas sexuales de riesgo. De este modo, el brote de viruela del mono de 2022 afectó sobre todo a varones homosexuales que tenían múltiples encuentros sexuales en fiestas y/o saunas, en las que estaba generalizado el chemsex (Santos et al. Public Health Nurs 2024; 41: 589-601; Kowalski et al. J Med Virol 2023; 95: E29172).

La promoción de nuevas estrategias de prevención de ITS, como el uso de doxiciclina como profilaxis previa o posterior a la exposición sexual de riesgo (doxy-PEP) no es suficiente para contener el aumento actual de ITS, dada su limitada eficacia (Boschiero et al. Sex Transm Dis 2024; Editorial. Lancet Infect Dis 2024; 24: 1059). Además, existe el temor con doxy-PEP de un mayor riesgo de selección y transmisión de resistencias a tetraciclinas, tanto en gonococo (Reichert et al. Lancet Microbe 2024) como en otras bacterias (Chu et al. Nat Med 2024).

El beneficio de la PrEP para reducir la adquisición del VIH debe ser ponderado con el efecto compensatorio que ocasiona un mayor número de ITS, especialmente en varones homosexuales (Torres-Silva et al. Lancet HIV 2024; 11: e670-9). Este es el colectivo que impulsa en gran medida la actual y alarmante epidemia de ITS. Existe una necesidad urgente de intervenciones adaptadas a este grupo. El suministro de píldoras de PrEP debe ir acompañado de información adecuada sobre los riesgos de la promiscuidad sexual y la conveniencia de utilizar preservativos. En última instancia, los beneficios serán tanto para el sujeto como para toda la sociedad.

Otra forma de confrontar el aumento alarmante de ITS consiste en favorecer el cribado diagnóstico. Dado que la mayoría de ITS suelen ser clínicamente silentes, el diagnóstico y el tratamiento tempranos reducirían mucho las posibilidades de transmisión en portadores asintomáticos. En Estados Unidos, estudios pioneros han demostrado el beneficio de realizar screening masivos de sífilis activa (RPR) en todos los adultos atendidos en servicios de urgencias (Stanford et al. OFID 2024). Por otro lado, se han comercializado pruebas rápidas para algunas ITS, como la sñifilis, incluidos tests caseros, como para el COVID o el embarazo.

El diagnóstico precoz de ITS es crucial en las mujeres embarazadas. En Estados Unidos, se comunicaron 207.255 casos de sífilis en 2022, un aumento de más del 17% en solo 1 año, según los CDC. De esos casos, 3.761 fueron sífilis congénita, que ocasionaron 282 niños nacidos muertos o que fallecieron al poco de nacer (McDonald et al. MMWR 2023; 72: 1269-74).

Aumento de las ITS en España

El Ministerio de Sanidad ha publicado recientemente las cifras de ITS en España para el año 2023. Se ha registrado un aumento significativo para clamidia, gonorrea, sífilis y linfogranuloma venéreo (LGV). Junto con las tendencias para esos agentes de ITS, el informe sobre nuevas infecciones por VIH demuestra un repunte desde la pandemia de COVID-19, deteniendo la reducción de años previos asociada a la expansión de la PrEP y del tratamiento antirretroviral para todos los diagnosticados con VIH.

En comparación con 2021, que fue el primer año tras el confinamiento de la pandemia, los aumentos en España en 2023 para infecciones sexuales han sido: 43% para gonorrea, 24% para sífilis y 21% para clamidia. Hasta el 80% de todas las ITS durante 2023 se notificaron en varones. Sin embargo, alcanzaron el 98% en LGV, el 88% en sífilis y el 80% en gonorrea. Los casos de clamidia en varones representaron el 53%.   

Por edad, la clamidia fue la ITS más frecuentemente diagnosticada en menores de 25 años en España. La gonorrea también tuvo un pico en los jóvenes entre 20 y 24 años. La sífilis se diagnosticó a edades más avanzadas, con una mediana de 34 años en varones y de 37 años en mujeres. En España se diagnosticaron un total de 7 casos de sífilis congénita durante 2023. 

Cómo combatir la actual pandemia de ITS: educación y diagnóstico precoz

Además de los síntomas clínicos agudos, las consecuencias de por vida de las ITS incluyen enfermedad inflamatoria pélvica con dolor crónico abdominal, infertilidad y cáncer. Las autoridades sanitarias deben promover comportamientos sociales que protejan a los ciudadanos de efectos nocivos. La información adecuada debe proporcionarse a tiempo, repetirse periódicamente y adaptarse a los distintos tipos de población. 

Los mensajes para los adolescentes en las escuelas deben ser diferentes de la información dada a los adultos que acuden a las clínicas de ITS. Es prioritario diseñar programas de educación sobre sexualidad y afectividad para jóvenes, que dimensionen la persona y el sentido integral de la sexualidad. Es un reduccionismo dañino considerarla solo genitalidad. En los centros de salud, hay que proporcionar información sobre el reconocimiento temprano de las ITS y las medidas para reducir el riesgo de contagios, que incluyen evitar la promiscuidad y el chemsex, además de utilizar preservativos.

Las ITS producen importantes consecuencias sexuales, reproductivas y para la salud materno-infantil. Para controlar las ITS se necesitan intervenciones dirigidas a promover comportamientos sexuales más saludables, respetando la libertad individual, al igual que se ha llevado a cabo con el tabaco, el alcohol, la dieta y el estilo de vida. Por tanto, es urgente abordar nuevos enfoques en la educación afectivo-sexual y el manejo de la salud sexual que se traduzcan en claros beneficios para las personas y la sociedad.